CARAMELOS DE MENTA...

He tardado un poco en escribir esta entrada, sobre todo, porque he estado desconectada... pero bueno, allá vamos...
Si os digo Caramelos de menta igual ni os suena o pensáis... ¿Perdona? ¿Esto es un blog serio de verdad?
Si ahora añado que es un libro y te digo esto en el DÍA INTERNACIONAL DEL LIBRO INFANTIL Y JUVENIL, igual alguno dice: ¡Ah...! e incluso a alguno le vendrá la imagen de esto...

A mí la que me viene es esta...

Porque esto es lo que yo vi la primera vez que el libro llegó a mis manos. Fue el segundo libro que leí, con 6 años y, por eso la imagen que yo tengo es un poco menos actual. Pero aún recuerdo las aventuras de un perro que salía junto a unos niños y junto al que corren mil aventuras para recuperar el dinero que les pide un tendero del barrio porque el perro le ha destrozado (de esto no me acuerdo mucho, lo intuyo nada más) algún producto de su tienda. Y hace pocos días, su autora se nos fue. Así que quiero dedicarle este día especial a Carmen Vázquez-Vigo, de la que probablemente ni siquiera sabéis que fue madre de una conocida actriz española...

Carmen Vázquez-Vigo (Buenos Aires 1923-Madrid 2018) era hija de padres españoles. Estudió bachillerato en Argentina y también en el Instituto de Arte Escénico de Buenos Aires, antes que su familia retornara a España.

Aquí trabajó como actriz teatral y en 1949 fue la protagonista de El zoo de cristal (Tenesse Williams) con la compañía de Teatro de Ensayo La Carátula. Compaginó esta actividad con la de traductora de libros infantiles y juveniles ya que dominaba el inglés, francés e italiano junto al castellano. Publicó por primera vez en 1963. Entre 1960 y 1965 colaboró en la revista infantil Bazar, en tanto se dedicaba también a la escritura de guiones radiofónicos con cuentos escenificados en varios programas semanales de Radio Exterior de España. A lo largo de su dilatada trayectoria como escritora logró diferentes reconocimientos como el premio Doncel 1966 en la modalidad de cuento juvenil por Quiquiriqui; el premio Lazarillo 1973 por Caramelos de menta (ahora ya os suena algo), obra que ya había sido premiada en la modalidad del Premio Doncel en 1972. En 1977 se hizo con el premio AMADE de Teatro infantil por Aire de colores, mientras que en 1992 recibió el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil por Un monstruo en el armario. (Fuente: Ed.SM).